Esta receta es un clásico de la cocina bretona. Allí lo llaman Caramel au beurre salé au sel de Guérande. Aquí variaré ligeramente la receta, ya que en la Bretaña francesa es bastante fácil encontrar mantequilla salada con sal marina que le aporta un toque crujiente, en la que se basa la receta.
Ingredientes
- 300 g de azúcar
- 2 cucharadas de agua
- 25 cl de nata para montar (35% MG, la podemos encontrar como crème fleurette)
- 80 g de mantequilla salada
- Una pulgarada de sal marina (gorda o grancilla)
Servicio
- Un tarro de cristal con tapa para guardar en la nevera.
Preparación
- En una cazuela o sartén poner a fuego medio bajo el azúcar con el agua. Esto va para largo, pero no hay que dejar de vigilar.
- Cuando empiece a coger color, bajar el fuego al mínimo, remover sin parar hasta obtener un caramelo fluido.
- Añadir la nata con cuidado, ya que al ponerla va a entrar en ebullición. Tranquilos.
- Una vez incorporada la nata, remover hasta que quede un caramelo homogéneo de color café con leche.
- Templar y añadir entonces la mantequilla y la sal.
- Antes de que se enfrie del todo, traspasar al tarro de conservación. Dejar enfriar.
- Conservar en la nevera.
Indicaciones
- El toque de sal es para que queden los granos más o menos enteros y que cuando de comes el caramelo, de vez en cuando, ¡crack! Indescriptible.
- Dar indicaciones de utilización de este caramelo es como intentar dar indicaciones de uso de la sal. Cuando lo probéis, ya se os ocurrirá dónde ponerlo.